Vera efigie del Venerable Luis Beltrán, de Juan de Sariñena

En esta sesión del ciclo Arte para todos. Aprendiendo a mirar un cuadro, conoceremos la obra de Juan de Sariñena, Vera efigie del Venerable Luis Beltrán.

Este óleo sobre tabla, fue pintado al natural el mismo día de la muerte del misionero dominico Luis Beltrán, para que quedase un recuerdo fidedigno de su aspecto. Murió en olor de santidad, y sería beatificado en 1608 y canonizado en 1671. Tiene los ojos cerrados, y sus brazos están en la misma posición en la que fueron colocados cuando fue expuesto en un lecho para la contemplación de su cadáver por los valencianos. Una inscripción en la parte superior identifica esa verdadera imagen del venerable, acompañada de los monogramas de Jesús y Maria.